Palazzo Hercolani
El Palazzo Hercolani se erige imponente a lo largo de la Strada Maggiore, en la parte este de la ciudad, pero aún en el centro. Este impresionante palacio toma su nombre de la noble familia Hercolani, que lo encargó a fines del siglo XVIII y principios del XIX, y lo poseyó hasta 1973, cuando lo vendieron a la Universidad de Bolonia. Aunque su arquitectura imita las formas renacentistas, en realidad pertenece al período neoclásico. Uno de los elementos más destacados del Palazzo Hercolani es su gran escalera doble, que deja sin aliento a los visitantes. Además, se pueden admirar las esculturas y pinturas que lo adornan, como la Ascensión de Hércules al cielo en su cúpula. Sin embargo, hay otros ambientes valiosos en el primer piso, como algunas salas con frescos que representan escenas chinas, que no están claramente accesibles al público. Sin embargo, no solicitamos visitarlos, por lo que desconocemos si están cerrados o no. El palacio también cuenta con exquisitos jardines, cuidados y amplios, que ofrecen una sensación de tranquilidad en medio del bullicio de la ciudad. Además, el salón de baile y el jardín de invierno son elementos de gran valor arquitectónico que deberían ser incluidos en el circuito turístico de esta espléndida ciudad. El Palazzo Hercolani es un lugar impregnado de historia y arte, con obras que se pueden apreciar en su interior. Aunque no siempre esté rodeado por el mejor entorno, es un lugar que merece una visita. En particular, su escalera principal, el salón de baile con sus bóvedas pintadas y el jardín de invierno son destacados. Este magnífico palacio es actualmente sede de la Facultad de Ciencias Políticas de la Universidad de Bolonia, lo que requiere hacer una solicitud para acceder a la visita. Es un edificio suntuoso que sigue el estilo arquitectónico del siglo XVI, con la excepción de la espectacular escalera de entrada de estilo barroco. En el primer piso, se encuentra la Sala dedicada a la Fama y al Genio Humano, con valiosos frescos. Junto a ella, el Salón de honor con la alegoría de Apolo y las Horas. Las paredes de este salón están prácticamente desnudas, ya que la colección de cuadros que las decoraban ahora se encuentra conservada en la Pinacoteca de Pesaro. Estos cuadros fueron el pago de un préstamo recibido de Gioacchino Rossini, quien donó sus posesiones a su ciudad natal después de su muerte. En la planta baja se encuentran dos salas realmente sugestivas: la sala del Zodiaco y la espléndida sala conocida como La Boschereccia, inspirada en los jardines europeos del siglo XVIII. La escenografía de esta sala es incomparable, incluso en los detalles, como las técnicas utilizadas en el techo con paredes curvas que, mediante una ilusión óptica, hacen que las ramas de los árboles parezcan inclinarse. Las estatuas que decoran la escalera también son impresionantes y aumentan la teatralidad del lugar en clara contraposición con la arquitectura limpia de la fachada exterior. Recomiendo visitar el Palazzo Hercolani, sea combinándolo con otras atracciones cercanas, como el Palazzo Davia Bargellini, la Chiesa dei Servi o el Museo della Musica. Este palacio hará las delicias de los amantes de la historia, el arte y la arquitectura, sumergiéndolos en una experiencia única que evocará la grandeza pasada y presente de Bolonia.