Castillo de Sant'Angelo
El Castillo de Sant’Angelo es uno de los tesoros ocultos de Roma que no debe pasarse por alto. Situado a orillas del río Tíber, este antiguo mausoleo convertido en fortaleza papal ofrece una experiencia fascinante llena de historia y unas vistas panorámicas impresionantes.
Al adentrarse en el castillo, los visitantes son transportados a través de los siglos a medida que exploran las diversas salas y exposiciones. Las exhibiciones de pinturas, grabados y fotografías muestran cómo era el castillo en tiempos pasados, mientras que las maquetas a escala permiten visualizar su evolución a lo largo del tiempo.
Una de las principales atracciones del Castillo de Sant’Angelo son las vistas desde lo alto de sus tres niveles. La panorámica de Roma desde esta altura es simplemente espectacular. Se pueden admirar el río Tíber, el Vaticano y la majestuosa Piazza Venezia. Tomarse un momento para relajarse y disfrutar de un café en el café ubicado en la terraza es una experiencia inolvidable, especialmente al atardecer.
Aunque el castillo no es uno de los monumentos más visitados de Roma, aquellos que lo descubren se sorprenden gratamente. La visita guiada es recomendable para una experiencia más enriquecedora, aunque los paneles informativos disponibles en italiano e inglés brindan suficiente contexto a aquellos que prefieren explorar por su cuenta.
Además de su belleza histórica, el castillo también ofrece un amplio parque circundante que invita a los visitantes a pasear y disfrutar de los alrededores. El Castillo de Sant’Angelo se encuentra a poca distancia del Vaticano, lo que lo convierte en una parada conveniente durante un recorrido por los monumentos más importantes de la ciudad.
Si bien el mantenimiento y la limpieza podrían mejorar, la entrada no es costosa y los menores no pagan, lo que lo convierte en una opción accesible para todos los viajeros.
El Castillo de Sant’Angelo es una visita obligada en Roma. Su historia fascinante, sus vistas panorámicas y su ubicación estratégica lo convierten en una joya escondida que merece la pena descubrir. Así que, no olvides incluir este impresionante castillo en tu itinerario de viaje por la Ciudad Eterna.