Fontana dell'acqua Felice
Si estás planeando una visita a Roma, seguramente tienes en mente recorrer las famosas fuentes de la ciudad, como la Fontana di Trevi. Sin embargo, existe una joya menos conocida pero igual de encantadora: la Fontana dell’acqua Felice.
Ubicada a una cuadra de la Plaza de la República y junto a la Iglesia Santa María de la Victoria, la Fontana dell’acqua Felice puede pasar desapercibida para muchos turistas. Sin embargo, vale la pena detenerse y echar un vistazo a esta magnífica obra arquitectónica.
Construida por el Papa Sixto V a finales del siglo XVI, la Fontana dell’acqua Felice marca el final de un acueducto que suministraba agua a los barrios de las colinas del Viminal y el Quirinal. El diseño de la fuente fue realizado por Giovanni y Domenico Fontana, quienes se inspiraron en monumentos como las Termas de Diocleciano y el Panteón.
Al acercarte a la fuente, te sorprenderá la imponencia de la escultura central: la estatua de Moisés, señalando milagrosamente las aguas surgidas de la roca. Esta figura ha sido objeto de controversia y críticas a lo largo de los años, debido a su desproporción y estilo anacrónico. Incluso se dice que su autor, Leonardo Sormani, se suicidó como resultado de esas críticas.
Además de la estatua de Moisés, la Fontana dell’acqua Felice cuenta con otros elementos destacados, como los leones en estilo egipcio que custodian la fuente. Estos leones, realizados en pórfido y mármol claro, fueron trasladados desde el Panteón de Agripa.
Aunque no es tan famosa como otras fuentes de Roma, la Fontana dell’acqua Felice sigue siendo un lugar interesante para visitar. Su ubicación, cerca de la iglesia de Santa María della Vittoria, le agrega un encanto adicional. No olvides explorar el área y disfrutar de otras atracciones cercanas, como la impactante obra de Bernini, ‘El Éxtasis de Santa Teresa’.
La Fontana dell’acqua Felice es un tesoro escondido en Roma. Si buscas una experiencia más tranquila y menos concurrida que las fuentes más populares de la ciudad, te recomiendo visitar esta hermosa fuente. Aunque no es un lugar para quedarse y descansar, vale la pena pasar, tomar una foto y maravillarte con su belleza arquitectónica. Aprovecha tu visita a la Plaza de la República y explora las maravillas históricas que ofrece este rincón de la ciudad eterna.
