Descubre las 7 joyas del centro histórico de Milán: guía de lugares imprescindibles
Bienvenidos viajeros y amantes de la cultura a uno de los destinos más fascinantes de Italia: el centro de Milán. En esta hermosa ciudad, donde la historia y la modernidad se entrelazan, la arquitectura, el arte y la gastronomía se fusionan para dar lugar a una experiencia única. Si estás buscando los mejores lugares para visitar en el centro de Milán, ¡no busques más! Aquí te dejamos una lista con las cosas imprescindibles que tienes que ver en este maravilloso lugar.
Cosas que ver en Centro histórico, Milán
1. Catedral (Duomo)
Catedral (Duomo): Un impresionante tesoro arquitectónico
El Duomo es, sin duda, uno de los lugares más emblemáticos y visitados de Milán. Esta magnífica catedral gótica, con su fachada cubierta de esculturas de mármol blanco, ocupa la plaza principal de la ciudad y sus torres gemelas desde siempre han sido un punto de referencia para los visitantes.
Pero lo que realmente hace que el Duomo sea uno de los tesoros más valiosos de Milán son las vistas desde su terraza en la azotea. Los visitantes pueden subir a la cima de la catedral para disfrutar de unas impresionantes vistas panorámicas de la ciudad y, en días claros, se puede incluso ver la cadena montañosa de los Alpes.
El interior del Duomo es igualmente impresionante, con hermosos frescos, vidrieras y obras de arte que se remontan a la Edad Media. Además, el Museo del Duomo, que cuenta la historia de la construcción de la catedral y alberga muchas de las obras de arte originales, es un complemento perfecto para la visita. Vale la pena reservar una tarde para esta atracción para poder aprovechar todas las oportunidades que ofrece.
2. Galería de Vittorio Emanuele II
La Galería de Vittorio Emanuele II es una de las atracciones imperdibles en el centro histórico de Milán, ubicada frente al Duomo. Su impresionante arquitectura y elegancia la convierten en una de las galerías comerciales más famosas e icónicas del mundo. En su interior, se pueden encontrar numerosas tiendas de lujo y restaurantes, así como lugares para disfrutar de un buen café italiano.
A pesar de que los precios son elevados, la belleza del lugar es suficiente para justificar una visita. La galería cuenta con varios pisos y cada detalle en sus paredes, techos y pisos es asombroso. Se pueden encontrar tiendas exclusivas como la de Prada, que mantiene piezas de la tienda original.
Visitar esta galería es como entrar en una película. Es una obra arquitectónica maravillosa, que destila lujo y glamour. Además, su ubicación entre la Piazza della Scala y el Duomo, la convierte en un sitio imprescindible para ver en Milán. Se recomienda ir temprano para evitar las multitudes y para aprovechar al máximo la experiencia de caminar por sus pasillos y observar cada detalle.
Si bien no es necesario comprar algo, la galería es un lugar para admirar y disfrutar de cosas bellas. Es importante tener en cuenta que está siempre repleta de visitantes, modelos y personas que quieren vivir un momento digno de influencer. Si lo que buscas es simplemente dar un paseo, esta galería es perfecta para eso.
3. La Última Cena
La famosa obra maestra de Leonardo Da Vinci, ‘La Última Cena’, es sin duda una atracción que no te puedes perder en tu visita al centro histórico de Milán. Para poder disfrutar de la pintura en toda su magnitud, sin perder ningún detalle, se recomienda hacer la visita con una guía en tu propio idioma. Los expertos guías explican detalles de la pintura que uno mismo no sería capaz de analizar. Y aunque la visita completa dura solo una hora, ciertamente valdrá la pena cada minuto.
Ubicada en la iglesia de Santa Maria della Grazie, reservar con antelación a través de la misma boletería del sitio es mucho más cómodo, aunque las entradas se agoten rápidamente. Es innegable que esta obra maestra ha estado cerca de desaparecer, por lo que el trabajo de restauración es impresionante. Vale la pena destacar que el mural ha sufrido algunos daños con el paso del tiempo, pero es importante tener en cuenta que no es sencillo mantener esta técnica. Sin embargo, la pintura sigue siendo una joya impresionante.
La entrada a la iglesia está muy controlada y la visita dura solo 15 minutos. Por eso, es importante descargar la audioguía gratis al entrar para no perder ningún detalle y sacarle el máximo partido a esta experiencia. A pesar del poco tiempo de estancia, la visita es muy ilustrativa y podrás conocer todos los detalles del icónico mural de Leonardo Da Vinci. Si eres amante de la historia y la pintura, no puedes dejar de visitar este lugar imprescindible en tu tour por Milán.
4. Castello Sforzesco
El Castello Sforzesco es una fortaleza ubicada en el corazón de Milán, que ha sido restaurada y se encuentra en excelentes condiciones. Como mencionan varios usuarios, la entrada al patio interior es libre, mientras que para acceder al castillo en sí, hay un costo. Sin embargo, alrededor de él se encuentran los hermosos Jardines Sempione, que son gratuitos y un excelente lugar para pasear.
Dentro del Castello Sforzesco, hay varios museos que los usuarios mencionan. Por un costo adicional de 5€, se puede obtener acceso a ellos. Los museos abarcan desde arte y escultura hasta arqueología y armamento medieval. Como menciona un usuario, dependiendo de tus gustos, algunos museos valen la pena más que otros.
Varios usuarios destacan la belleza y majestuosidad del castillo, y recomiendan tomarse el tiempo necesario para explorar su interior y exterior. Sus jardines son especialmente impresionantes y espectaculares. Además, como destacan algunos usuarios, el castillo se encuentra a un corto paseo de la última cena, lo que lo convierte en una excelente adición a un día de turismo en la ciudad de Milán.
5. Piazza del Duomo
Piazza del Duomo es una de las atracciones más famosas en el centro histórico de Milán, aunque para algunos visitantes no sea su lugar favorito. Al recorrer la plaza se aprecian edificios majestuosos y de arquitectura imponente en su entorno, lo que resulta atractivo para los amantes de la historia y la arte. Además, la catedral es imponente y se encuentra rodeada de una gran cantidad de personas, lo que puede dificultar la circulación en horas punta y días de eventos.
La visita al Duomo en Milán es un verdadero espectáculo que debe vivirse en primera persona. Desde la cima se pueden observar vistas panorámicas de la ciudad, así como una impresionante vista del mismo Duomo. Este recorrido es una experiencia memorable que se puede disfrutar en cualquier época del año, aunque se recomienda visitar la plaza en horarios tranquilos para evitar las aglomeraciones.
Más allá de la catedral, Piazza del Duomo es un lugar ideal para hacer compras en tiendas exclusivas de las mejores marcas. La oferta gastronómica es variada y permite disfrutar de platos típicos de la región. Si se visita en Navidad, el ambiente es aún más mágico por las luces, los adornos y la presencia del árbol de navidad. A pesar de algunos inconvenientes que pudieran presentarse, el consenso general es que Piazza del Duomo es un lugar ícono de Milán que no te puedes perder.
6. Chiesa di San Maurizio al Monastero Maggiore
Uno de los tesoros escondidos del centro histórico de Milán es la Chiesa di San Maurizio al Monastero Maggiore. A pesar de su fachada modesta, el interior de la iglesia es una verdadera obra de arte. La decoración es impresionante con frescos pintados en todas las paredes y el techo. De hecho, algunos incluso la comparan con la famosa Capilla Sixtina. La segunda estancia también cuenta con un coro precioso. Lo mejor de todo es que la entrada es gratuita, lo que la hace aún más atractiva para los turistas.
Aunque la iglesia no es muy conocida por los visitantes, aquellos que se aventuran a visitarla no se arrepentirán. Varias estaciones de metro están cerca, lo que la hace de fácil acceso. La iglesia está abierta de martes a domingo, de 9:30 a.m. a 5:30 p.m. y no cierra al mediodía. Los lunes permanece cerrada.
Los visitantes pueden quedarse maravillados con los frescos, pintados por un discípulo de Leonardo da Vinci, que adornan las paredes de la nave central y posterior, donde se ubicaban las monjas del monasterio. Además, la iglesia se encuentra junto al Museo Arqueológico, por lo que es ideal para combinar la visita y hacer una parada durante el camino entre el centro y Santa Maria della Grazie. Si estás en Milán, sin duda debes visitar la Chiesa di San Maurizio al Monastero Maggiore, ¡no te arrepentirás!
7. Pinacoteca di Brera
La Pinacoteca di Brera es uno de los museos más importantes de Milán y posee una impresionante colección de obras maestras de la pintura mundial. Además de su increíble colección, esta pinacoteca es un gran lugar para escapar del ruido y el calor de la ciudad, con un ambiente tranquilo y relajante en el que se puede disfrutar del arte en toda su gloria.
Entre las maravillas del museo destacan algunas obras maestras de Caravaggio, así como piezas de Piero della Fancesca, Mantegna, Rafael y Modigliani, entre otros importantes pintores italianos. También hay una curiosa estatua de Napoleón, como si fuera un dios romano, y el claustro con una escultura central y varias más bajo los arcos es una verdadera joya.
El precio de la entrada a la Pinacoteca di Brera es de 15€, por lo que puede parecer un poco excesivo, pero vale la pena cada centavo. Si decides visitar este museo, es recomendable que compres las entradas por anticipado en la página web oficial para evitar filas. Aunque no es necesario, puedes alquilar una audioguía para ampliar tu experiencia. También es importante asegurarse de los horarios y cierre del museo.
Visitar la Pinacoteca di Brera es imprescindible para aquellos que disfrutan del arte y quieren tener una experiencia única. Con más de tres horas de pintura, este museo es un lugar donde el alimento del espíritu está garantizado. Además, su ubicación en los alrededores del Centro histórico de Milán lo convierte en un lugar perfecto para pasar una tarde agradable en la ciudad.
8. Duomo Rooftops
Duomo Rooftops es una de las mejores atracciones turísticas en el centro histórico de Milán que definitivamente no debe perderse en su visita a la ciudad. A medida que ascienda más y más, el paisaje urbano de Milán se desplegará ante sus ojos. Muchos visitantes sugieren subir por las escaleras, ya que no es muy difícil, y también se puede disfrutar de la vista mientras se sube. Otros visitantes pagan un poco más por el ascensor por el ahorro de energía que implica.
La experiencia de subir a las alturas de la catedral es a menudo el punto culminante del viaje para muchos visitantes. El viaje hasta la cima puede ser un poco agotador, pero las impresionantes vistas panorámicas de la ciudad desde la cima hacen que la caminata valga la pena. Además, la subida por las escaleras es amplia y segura, por lo que los visitantes no tienen que preocuparse por la altura.
Las entradas para los Duomo Rooftops se pueden comprar en línea o en taquilla. Si bien es posible comprar entradas para la subida en ascensor, es importante tener en cuenta que solo se aplica al ascenso. Por lo tanto, el descenso se realiza a pie a través de escaleras. Las entradas para subir a pie cuestan alrededor de 10 €, mientras que las entradas para subir en ascensor cuestan alrededor de 15 €. La vista de la ciudad desde arriba hace que la experiencia en el Duomo valga la pena.
9. Teatro Alla Scala
Si estás buscando una experiencia cultural y artística única, no puedes perderte una visita al Teatro Alla Scala en el corazón del centro histórico de Milán. Esta impresionante sala de ópera, también conocida simplemente como La Scala, ha sido considerada como uno de los teatros más importantes del mundo y es un lugar emblemático que ningún viajero debería dejar de visitar.
En el interior del Teatro Alla Scala, te maravillarás de su esplendor y majestuosidad, con amplias escaleras de mármol y detalles arquitectónicos impresionantes, que han sido cuidadosamente restaurados para preservar su belleza original. Ya sea que estés disfrutando de un ensayo o una representación real de ópera o ballet, estarás rodeado de glamour y elegancia, transportándote a otra época.
Además, La Scala ofrece visitas guiadas que te permitirán conocer más sobre la historia y la cultura de la ciudad de Milán. Acompañado de un guía experto, aprenderás sobre la importancia histórica del teatro, disfrutando de un recorrido por sus enormes escenarios y vestuarios, así como de la impresionante colección de pinturas y esculturas que adornan sus paredes.
El Teatro Alla Scala es sin duda una de las joyas históricas de Milán, que merece la pena incluir en tu recorrido por la ciudad. Las entradas están disponibles para sus distintas representaciones, con precios variados dependiendo de la obra y la ubicación deseada. Consulta la página web oficial para conocer los horarios y programación actualizada, y no te pierdas de una experiencia única en la realeza de la ópera y el ballet.
10. Basilica di Sant’Ambrogio
Basilica di Sant’Ambrogio es una iglesia impresionante con una amplia riqueza histórica ubicada en pleno corazón del centro histórico de Milán. Esta basílica fue construida en el siglo IV y reconstruida en el siglo XI, lo que le confiere un estilo arquitectónico románico realmente cautivador. En su interior se pueden encontrar los restos de los santos Gervasio y Protasio en la cripta, además de un patio interior que es realmente hermoso. Se puede decir que es una visita obligada para los amantes de la arquitectura y la historia.
Una de las características más destacadas de la Basilica di Sant’Ambrogio es que la entrada es completamente gratuita. La belleza del lugar y su rica historia lo convierten en uno de los lugares más interesantes que recorrer en la ciudad. Además, se encuentra en el circuito de iglesias tradicionales de Milán, lo que la hace aún más emocionante. No es un lugar muy turístico, así que se puede disfrutar con tranquilidad de todo lo que esta magnífica basílica nos ofrece.
Su exterior es impresionante y es una construcción maravillosa que vale la pena visitar en Milán. Hay mucha historia en esas ruinas, por lo que es realmente impactante. Por dentro también es muy bonita y se puede admirar la rica historia que ha tenido la iglesia a lo largo del tiempo. Visitar una basílica como esta, en medio de una ciudad tan histórica como Milán, siempre es agradable, un breve regreso al pasado por unos momentos.
Está ubicada cerca del Duomo, San Lorenzo y Santa Maria Delle Grazie por lo que una visita perfecta será encajarlas todas en un mismo recorrido. Abierta todos los días de 10:00 a 18:00 y es recomendable dedicar al menos un par de horas a su degustación para algunos de los detalles que ofrece son maravillosos. Se puede afirmar que la iglesia Basilica di Sant’Ambrogio en Milán es una verdadera joya para aquellos que aprecian el arte y la cultura, merece una parada obligatoria en cualquier itinerario.
11. Santa María de la Gracia
Santa María de la Gracia es una hermosa edificación que se encuentra muy cerca de uno de los sitios más destacados de Milán, el cuadro de La Última Cena, lo que la convierte en una visita obligatoria durante tu estancia en la ciudad. Con una arquitectura que te dejará asombrado, aunque está un poco deteriorada, esta iglesia es un lugar imprescindible en tu recorrido por el Centro histórico de Milán.
La visita a Santa María de la Gracia está muy bien organizada, lo que resulta en una experiencia agradable y segura en medio de la pandemia. Es importante que recuerdes que debes reservar tus entradas con anticipación a través de la web, ya que se agotan con rapidez. Una vez que entres a la iglesia, verás que es sencilla pero muy hermosa, con una decoración que te hará sentir en un lugar sagrado. Además, en el convento que se encuentra al lado de la iglesia, podrás ver el famoso Cenatorio, el cuadro de La Última Cena de Leonardo da Vinci que ha hecho famoso este sitio.
El Cenatorio es una obra de arte que sin duda merece la pena visitar, ya que se trata de una pequeña parte de la historia de la humanidad. Si no conoces mucho sobre este cuadro, te recomendamos que leas sobre ella antes de la visita o que tomes un guía que te dará toda la información necesaria. No te pierdas esta oportunidad de ver una obra tan famosa en persona, y recuerda reservar con mucha antelación para no perderte esta experiencia única.
Santa María de la Gracia es un sitio perfecto para disfrutar de una experiencia llena de cultura e historia, que te hará sentir que estás viajando en el tiempo.
En resumen, Milán es una ciudad rebosante de cultura, elegancia y diversión. La apasionante historia de la ciudad y su vibrante vida callejera se funden en un ambiente emocionante que no te dejará indiferente. Si te ha gustado nuestro artículo, te invitamos a que compartas con nosotros tus propias recomendaciones y sugerencias sobre qué hacer en el centro histórico de Milán. Nos encantaría seguir descubriendo juntos todo lo que esta fascinante ciudad tiene que ofrecer. ¡No dudes en interactuar con nosotros en los comentarios!